Sobre los ataques a los derechos

Los que ahora (PP) acusan, de manera desaforada pero sesgada e incierta, al actual Alcalde de atacar los derechos de los trabajadores (Policía municipal), con motivo del fallo recaído en el Contencioso “solicitando la impugnación y nulidad del acto administrativo relativo a un cuadrante de servicios de estos funcionarios”, parecen olvidar de manera interesada la actuación que su partido (PP) y su Alcalde tuvieron a lo largo del tiempo con este mismo colectivo y con otros representantes sindicales despedidos por ejercer su labor sindical a quien con posterioridad fueron condenados a readmitir.

En la primavera-verano de 2000, los Agentes de Policía de Moralzarzal se negaron a realizar durante su horario laboral gestiones fuera del municipio, la mayoría de ellas de tipo particular, salvo que fueran recibidas por escrito porque ello suponía abandonar sus funciones en detrimento del servicio a los vecinos.

La persecución recibida por defender sus derechos laborales y sindicales, y por exigir el respaldo oportuno para poder atender las ordenes que se les imponían fue variada y humillante.

Fueron acusados de vagancia, de irresponsabilidad, de recluirse en sus oficinas en horas de trabajo para merendar y consultar páginas pornográficas, se les llegó a requisar sus armas por entender que cuando las portaban “si existía un problema de seguridad” (sic); en fin una verdadera locura, de la que quedan numerosísimos registros en las hemerotecas.

Lo más chusco fue imponerles su jornada laboral (8 horas) a dirigir el tráfico, sobre una isleta pintada a tal fin (punto blanco), en calles de escaso tráfico de vehículos. Solo podían abandonar la isleta para hacer sus necesidades y tomar el bocadillo en el tiempo hábil para ello.

Aquí quedan algunas perlas, pero hay muchas más:

Señores del PP eso si es atacar los derechos fundamentales y laborales de los trabajadores, incluso los personales y humanos. Lo que Vds ahora pregonan son ganas de enturbiar la convivencia interesadamente; siempre existirán conflictos, es inevitable, pero se resuelven por los cauces legales, no por las “redes”, que según Vds dicen “ni las conocen”.